Determinar el tipo de acabado de interiores que se usará en una edificación es una tarea que debe tomarse muy en serio. Se debe pensar en cuáles son los colores, las tonalidades y las texturas acordes al estilo y diseño del lugar. A continuación te comentaremos algunos aspectos a considerar al respecto.
Acabado de interiores con piedra, granito y cerámica
La piedra, ya sea en las paredes o el suelo, crea ambientes en donde se integra estructura y superficie, y se proyecta solidez y poder.
El granito se puede usar en diferentes dimensiones y grosores ya sea en suelos, para revestir paredes, en encimeras o para superficies de trabajo. No obstante, hay que tener en cuenta que utilizar granito en espacios grandes, puede causar un efecto abrumador. En cambio en superficies pequeñas y usando colores intensos funciona bastante bien.
La cerámica ofrece una amplia gama de posibilidades decorativas tanto en espacios privados como públicos. Al comprarla es recomendable comprar más cantidad de la estrictamente necesaria debido a las pérdidas por cortes y biselados de terminación, o para futuras reparaciones.
Los colores en el acabado de interiores
En las paredes, ten en cuenta que los colores oscuros reducen el espacio mientras que los claros dan la sensación de amplitud. Para ganar profundidad, se puede pintar una pared más oscura que el resto. Si pintas franjas anchas de uno o más colores sobre un fondo blanco, crearás espacios dinámicos y con personalidad.
En el techo, si usas un color más claro que el de las paredes conseguirás crear un espacio que pareciera ser más alto. Pero si es más oscuro, el techo parecerá más bajo. Lo mismo sucede si la pintura de la pared se termina un poco antes de alcanzar el techo y se pinta una franja que sea del mismo color de este.